jueves, 28 de enero de 2010

la palabra tonto se dijo 803 veces

no cuento más que adeversidades o ilusiones
en el centro del Edén,
en la fumata de caramelo,
en el trifásico de castaño.

Mientras cruzaba el paso de cebra
pensaba en los que me sonrieron ayer,
en los que me tocan hoy,
en los que mañana me adivinarán la mirada.

El conductor del autobús no parece un ser feliz.
Como una persona sin raiz,
con fronteras.
Como una persona sin sofá,
sin cristaleras por donde observar
y reirse de esta vida pícara.

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